Tiempo libre, turismo y calidad de vida.

Untitled design

El turismo ha generado muchas preguntas al largo de la historia de su desarrollo. Preguntas orientadas tanto a la conceptualización del mismo, como la posibilidad de su estudio desde una disciplina que se dedique enteramente a ella, aunque valiéndose del auxilio de otras como la sociología, la psicología, la historia, la geografía, la economía, etc.

Existen muchas definiciones de turismo, planteadas por diferentes autores como Acerenza, Muñoz de Escalona, Boullón, Jafari y otros. La mayoría de ellas tiene que ver con la relación que tienen las actividades turísticas con el tiempo libre. La más utilizada, sobre todo en términos estadísticos, es la que aporta la Organización Mundial del Turismo, que lo define como “el turismo comprende las actividades que realizan las personas durante sus viajes y estancias en lugares distintos a su entorno habitual, por un periodo de tiempo consecutivo inferior a un año, con fines de ocio, por negocios y otros” (Organización Mundial del Turismo).

Partiendo de esta definición, hay dos conceptos a tomar en cuenta, el ocio y la recreación.

El turismo tiene lugar en el marco del tiempo libre y el ocio, los cuales se han llegado a entender mejor mediante los aportes efectuados por científicos sociales y empíricos.

¿Qué es el tiempo libre?

Ubicar al turismo en el contexto del tiempo libre, conlleva saber como se distribuye el tiempo social.

Según Munné (1980), citado por Acerenza (2006), el tiempo social está compuesto por cuatro tipos de tiempos:

El tiempo psicobiológico: también llamado tiempo de vida o tiempo vital, es el ocupado por las necesidades psíquicas y biológicas de las personas.

El tiempo socio-económico: o tiempo de trabajo, es el que ocupan las actividades relacionadas con el sustento económico, es decir, para ganarse la vida.

El tiempo sociocultural: es el que se requiere para la atención de las obligaciones familiares y sociales.

El tiempo libre: es que el dedicamos a aquellas actividades que tienen a satisfacer las necesidades auto creadas por las propias personas (Munné, 1980).

Según Munné, el tiempo libre puede definirse como: “aquel modo de darse el personal que es sentido como tiempo libre, al dedicarlo a actividades auto condicionadas de descanso, recreación y creación para compensarse, y en ultimo termino afirmarse la persona individual y socialmente” (Munné, 1980).

El ocio, a su vez, podría definirse como un sinónimo del tiempo libre, aunque hay corrientes de pensamiento que lo definen como algo diferente.

El turismo se da en el tiempo libre como una de las actividades que realizan las personas voluntariamente, sin embargo, no cubre todas las formas en que las personas pueden utilizar su tiempo libre. Además, según Acerenza, tampoco puede darse en todos los tipos de tiempo libre, ya que este se clasifica en: el tiempo libre de fin de jornada, el tiempo libre de fin de semana y tiempo libre de vacaciones  (Acerenza, 2006). Se puede entender entonces que el turismo no puede formar parte de las actividades de tiempo libre de fin de jornada, ya que, por definición, el turismo requiere un periodo de más de 24 horas, lo que nos deja entonces el tiempo libre de fin de semana y tiempo libre de vacaciones para esta actividad. Se concluye entonces que el turismo no puede incluir todas las formas de uso que las personas hacen de su tiempo libre.

El turismo es hermano del descanso, del desarrollo personal, de la diversión, del deporte y la recreación, ya que todas son actividades de ocio o que realizan las personas en su tiempo libre.

En la medida en que las personas utilizan su tiempo libre para realizar turismo, este puede contribuir a la mejora de su calidad de vida, así como el deporte y otras actividades de desarrollo personal. Además, al estudiar la historia del turismo, los países emisores de turistas comparten características similares de desarrollo económico que se traduce en el desarrollo social y pone al turismo como una de las actividades principales que pueden realizar sus ciudadanos, contribuyendo este a la mejora de la calidad de vida, una vez que las sociedades han logrado satisfacer sus necesidades mínimas de alimentación, salud, vivienda y educación.

 

Referencias

Acerenza, M. A. (2006). Conceptualización, origen y evolución del turismo. . México: Trillas.

Munné, F. (1980). Psicosociología dle tiempo libre: Un enfoque crítico. . México: Trillas.

Organizción Mundial del Turismo. (s.f.). Introducción al Turismo. OMT.

 

Deja un comentario

Blog de WordPress.com.

Subir ↑